

Estudios sobre el mundo árabe, en el centro del pulso de Trump contra universidades
En pleno pulso de Donald Trump con las universidades estadounidenses, a las que acusa de permitir "el antisemitismo", los investigadores académicos sobre Oriente Medio temen por la libertad de expresión.
Un ejemplo reciente es la suspensión de la publicación de una edición especial que la prestigiosa Harvard Educational Review (HER) iba a consagrar íntegramente a la cuestión palestina.
Pese a que los artículos habían sido meticulosamente editados y aprobados y estaban listos para su impresión, una revisión del servicio jurídico de la universidad de última hora decidió suspender la publicación.
Seis meses después de los ataques mortales del 7 de octubre de 2023 perpetrados por Hamás y el inicio de las represalias militares israelíes en Gaza, la revista lanzó en marzo de 2024 un llamado a contribuciones para un número especial sobre el conflicto.
La antropóloga Thea Abu al-Haj presentó con colegas un artículo sobre el "escolasticidio", término que busca designar la destrucción del sistema educativo en Gaza, ampliando la perspectiva a los docentes palestinos durante la guerra del Líbano (1975-1990).
La publicación se anunció en la primavera de 2025, pero pocas semanas después, los autores se enteraron de que sus textos debían ser finalmente sometidos al departamento jurídico de Harvard para una "evaluación de riesgos".
- "Excepción palestina" -
"Durante décadas he publicado en revistas científicas, incluso en dos ocasiones en la HER, y nunca me han pedido pasar por este tipo de revisión", explica a la AFP Abu al-Haj, profesora del Barnard College afiliado a la Universidad de Columbia.
Los autores denuncian "censura" y una violación de la "libertad académica". La directora de Harvard Education Press, Jessica Fiorillo, rechazó esas acusaciones y explicó lo ocurrido como "un proceso editorial de revisión inadecuado".
"La única explicación que veo es que se trata de otro caso de excepción palestina a la libertad de expresión", opina Abu El-Haj, para quien Harvard no es el "campeón" de la libertad académica que pretende ser frente a Trump.
Consultada por la AFP, Harvard no comentó la cancelación de este número especial.
En su confrontación con la universidad, el gobierno federal le ha bloqueado más de 2.600 millones de dólares en subvenciones y busca revocar el permiso que le permite acoger a estudiantes internacionales, quienes representan más de un cuarto de su alumnado.
Harvard afirma haber reforzado su protocolo para proteger a los estudiantes judíos o israelíes, al mismo tiempo que impugna las medidas del gobierno ante los tribunales.
- "Miedo y ansiedad" -
A principios del 2025, la universidad también despidió a los directivos de su Centro de Estudios sobre Oriente Medio, Cemal Kafadar y Rosie Bsheer.
Un grupo de profesores judíos progresistas criticó esa decisión y acusó a la universidad de ceder a las presiones al "sacrificar" a estos especialistas que defienden los derechos de los palestinos.
"Reina un clima glacial en torno a las investigaciones sobre Palestina en Harvard y más allá... Profesores, personal y estudiantes viven en un contexto de miedo y ansiedad', explica a la AFP Margaret Litvin, especialista en literatura árabe en la Universidad de Boston y miembro de este grupo de profesores.
En julio, Columbia firmó un acuerdo financiero de 221 millones de dólares con el gobierno para poner fin a las investigaciones de que es objeto y desbloquear las subvenciones congeladas.
Dicho acuerdo estipula que la universidad debe "revisar" su enseñanza sobre Oriente Medio.
Harvard también adoptó a principios de año, antes de que Columbia le siguiera en julio, la definición de antisemitismo propuesta por la Alianza Internacional para la Memoria del Holocausto (IHRA).
Sin embargo, esta definición no genera consenso, ya que sus detractores consideran que podría prohibir criticar a Israel. Y es precisamente lo que parece estar en el centro del desacuerdo sobre el número especial "Educación y Palestina", según Chandni Desai, profesora en la Universidad de Toronto, quien debía firmar un texto.
Los artículos presentados "probablemente no pasarían" la prueba de la definición de la IHRA porque "todos son críticos de Israel", dice a la AFP.
"Nunca hemos visto un número especial completo (de una publicación académica) ser cancelado (...) Es algo sin precedentes", señala.
C.Gunnarsson--StDgbl