

China y EEUU concluyen su primer día de negociaciones comerciales en Suecia
Las delegaciones china y estadounidense concluyeron este lunes en Estocolmo su primera jornada de un nuevo ciclo de negociaciones sobre sus aranceles recíprocos, que podría culminar con una prórroga de la tregua arancelaria alcanzada entre ambos países en mayo.
Esta tercera ronda de negociaciones entre las dos principales potencias económicas mundiales se celebra días antes de que expire el 1 de agosto el plazo fijado por Donald Trump a numerosos socios comerciales para evitar subidas arancelarias.
Las conversaciones, que tuvieron lugar en el edificio Rosenbad, donde se encuentra el gabinete del primer ministro sueco, terminaron hacia las 19H50 locales (17H50 GMT) y se reanudarán el martes, informó el Tesoro estadounidense a la prensa.
Los periodistas de AFP vieron a las delegaciones saliendo del recinto poco después de esta declaración.
No se comunicó ninguna información sobre los temas abordados en esta primera jornada.
Antes de iniciar el encuentro, China declaró que busca "respeto mutuo y reciprocidad" durante estas negociaciones.
"Se espera que la parte estadounidense, junto con China (...) reduzca los malentendidos, fortalezca la cooperación y promueva el desarrollo estable, sano y sostenible de las relaciones entre China y Estados Unidos," dijo el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Guo Jiakun.
Hay mucho en juego. Las subidas de las tarifas aduaneras oscilan entre el 10% y el 50% anunciado para los productos brasileños. México se expone al 30% y Canadá al 35%.
De concretarse estos recargos, aumentarán los aranceles promedio aplicados a los productos importados a Estados Unidos, que ya de por sí son los más altos desde la década de 1930, según el centro de investigación Budget Lab de la Universidad de Yale.
China y Estados Unidos entraron en abril en una escalada de tarifas aduaneras (125% a los productos estadounidenses y del 145% a los chinos) que rebajaron en una reunión en Ginebra y mantuvieron en otra en Londres.
La guerra arancelaria entre ambos países hizo temblar los mercados financieros y desató miedo a una recesión, pero desde entonces las aguas se han calmado y hasta China podría considerarse privilegiado.
- 90 días más -
Aunque sus productos están sujetos a un recargo del 30% por encima de los gravámenes en vigor antes del 1 de enero, no se esperan sorpresas desagradables, lo que es una buena noticia para los fabricantes chinos.
Las negociaciones en Estocolmo están encaminadas a extender la pausa de 90 días negociada en mayo en Ginebra.
Un objetivo que debería alcanzarse, según el diario chino South China Morning Post.
"Desde las conversaciones de Londres, parece haber un cambio bastante significativo en la estrategia de la administración (estadounidense) sobre China", estimó Emily Benson, jefa de estrategia en Minerva Technology Futures.
"Ahora se centra mucho más en lo que es posible lograr (...) y en contener cualquier factor que pueda aumentar las tensiones", declaró a la AFP.
- Brasil y México -
Por el momento no hay acuerdos de fondo, pero si progresos en temas importantes para ambas partes.
Estados Unidos logró flexibilizar las restricciones a las exportaciones chinas de tierras raras cuando se restableció parcialmente el acceso de Pekín a los semiconductores estadounidenses de alto rendimiento.
Una prórroga de la tregua indicaría "una señal de la voluntad de ambas partes de continuar las conversaciones", según Thibault Denamiel, investigador del CSIS en Washington.
Eso a la espera del siguiente paso: una reunión entre Donald Trump y su homólogo chino, Xi Jinping.
Otros países lo tienen más difícil, empezando por Brasil, al que Trump amenaza con castigar en parte por el juicio por intentona golpista contra el expresidente ultraderechista brasileño Jair Bolsonaro, víctima, según él, de una "caza de brujas".
El presidente izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva lo considera un "chantaje inaceptable". El caso es que la crisis diplomática desatada con Washington sigue sin resolverse a pocos días de la fecha límite.
México tampoco lo tiene fácil. Trump parece satisfecho con su colaboración contra la migración ilegal (una de sus primeras exigencias), pero estima que no se esfuerza lo suficiente en la lucha contra el tráfico de fentanilo.
Tampoco hay resultados en las negociaciones con Corea del Sur, Taiwán o India.
Tras una reunión en Escocia con la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, Trump anunció el domingo que la UE aceptó aranceles del 15% y se comprometió a invertir 600.000 millones de dólares adicionales en Estados Unidos. No especificó cuándo.
Indonesia, Japón, Filipinas, Reino Unido y Vietnam han alcanzado ya acuerdos con Washington. Todos ellos sufrirán subidas arancelarias de entre 15 y el 20%.
Z.Nyberg--StDgbl